Además de la asistencia a reuniones varias, aportación de ideas y disposición para arrimar el hombro altruista al lado de las instituciones y de otros grupos de chinatos que remaban a favor del Día de la Comarca, el Colectivo Cultural Chinato aportó: vídeos de producción propia, que se proyectaron al lado de las salas de exposiciones en la Casa de cultura; la organización y coordinación de las personas que integraban las estampas de trabajos tradicionales que se instalaron en los aledaños de la iglesia, y una visita guiada al monumental templo parroquial. Añádase la presencia de muchos de sus socios en todos los espacios de la muestra comarcana. Este bagaje no ha merecido una sola imagen en las páginas de las redes sociales que firma el Ayuntamiento, quizá como reflejo del aislamiento, descuelgue y vacío institucional a que fueron relegadas todas las personas que de buena fe y llenas de ilusión se esforzaron por ofrecer a convecinos y visitantes apuntes de nuestras tradiciones. Se entenderá que nos duelan descuidos como estos.
Esther, lavandera al estilo de antes
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